Ucrania, la mayor migración de Europa
La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), ambos organismos de refugiados y migraciones, alertaron que la cifra de personas que se han visto obligadas a abandonar sus hogares en los últimos meses asciende a casi 14 millones. De los cuales, casi 6 millones de estas personas tuvieron que cruzar las fronteras para buscar la seguridad en otros países.
Con esto la guerra de Ucrania se convierte en la crisis migratoria más grande en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. El último gran conflicto en la década de los 90, en los Balcanes, nos dejo tres millones de personas desplazadas en otras naciones.
Polonia, Eslovaquia, Hungría, Rumania, Moldavia han sido los principales países donde los desplazados optaron por emigrar, aunque también existen miles de estos refugiados no han permanecido en los países vecinos sino que han continuado su trayecto a otros Estados de la UE. Las cifras, sin embargo, son inciertas, debido a que la mayoría de movimientos migratorios se realizan de forma espontánea, impulsados es muchos casos por las redes familiares.
España fue uno de los principales países en aprobar el sistema para regularizar la situación de los refugiados de la guerra de Ucrania. El Gobierno decidió asegurar también la protección a otras personas aunque no entraran en los supuestos de la legislación europea: los residentes extranjeros en Ucrania, cualquiera que sea la duración de su permiso de residencia, y los ucranianos que residían sin papeles en España antes del inicio de la invasión rusa.
Desde la activación de este sistema para otorgar protección en España, más de 70.000 desplazados de Ucrania han conseguido ya los papeles. El dato incluye tanto las personas huidas del país en guerra desde el 24 de febrero, como los ucranianos que vivían en el país sin papeles y han regularizado su situación. Como ya comentamos las redes familiares son fundamentales para la selección del país de destino en los flujos migratorios. Y, según los datos de Eurostat, España es el cuarto país europeo con mayor número de residentes ucranianos, solo detrás de Polonia, Italia y República Checa.